Muchas veces hablamos de la importancia de limpiar y exfoliar nuestro rostro para mejorar los resultados de los tratamientos dermocosméticos. En particular, seguro que has oído hablar sobre peelings faciales, sin embargo solemos tener dudas sobre qué son exactamente y qué implica para nuestra piel, y en este caso concreto tratamos la zona periocular y perioral.
El concepto proviene del inglés “PEEL”, que básicamente se traduce en “PELAR”.Se trata de un procedimiento en el que se utilizan sustancias queratolíticas que producen una corrosión de leve a profunda en las capas de la piel. Esto se traduce en un proceso posterior de exfoliación o descamación de las células que se sitúan en la porción más externa de la piel.
Reduce considerablemente las células muertas de esas capas más externas, liberándolas y permitiendo que células más jóvenes y producidas en capas más profundas lleguen a ese nivel.
Es un peeling químico superficial, el ácido SALICÍLICO está indicado especialmente en pieles grasas y con acné.
Mejora de forma general el aspecto de la piel, acnéicas, con tendencia acnéica y con cicatrices de acné. Tiene múltiples indicaciones:
La piel estará irritada durante 7 días, la exfoliación comenzará a partir del tercer día y durará unos 7 días. Los resultados son notables a partir de la semana del tratamiento. Evitar hacer deporte durante 7 días y exposición solar al menos 3 meses.
En definitiva, este tipo de peeling tiene una acción antiséptica y contiene propiedades antimicrobianas que permiten la limpieza de poros en cualquier tipo de rostro, evitando la aparición de posteriores infecciones, por lo que resulta muy útil para problemas de acné.
PIDE TU CITA