Con el paso del tiempo el colágeno y la elastina se degradan y el que se forma nuevo es de peor calidad. Esto se traduce en una disminución de la elasticidad, aumento de la rugosidad y falta de hidratación.
Las causas intrínsecas como nuestro código genético individual no lo podemos cambiar , pero existen otros extrínsecos que sí podemos controlar en cierta medida para ralentizar el envejecimiento de la piel.
Para mantener una piel joven y radiante es necesario cuidarla de forma sostenida en el tiempo. La cultura flash beauty da resultados, pero no se mantienen en el tiempo. Para ello está el ÁCIDO HIALURÓNICO, para crear una relación a largo plazo con tu piel.
Es una molécula de azúcar que existe de forma natural en nuestro organismo. Su función en la piel consiste en regular el equilibrio hídrico y configurar volumen y mejorar la calidad y la integridad de la piel.
El ácido hialurónico de nuestro organismo se degrada y renueva constantemente pero sobre todo a partir de los 35 años hay que reponerlo, ya que se degrada más del que se fabrica.
A medida que envejecemos, nuestra piel va perdiendo grasa, colágeno y ácido hialurónico, sustancias que aportan sostén a nuestra cara. Van apareciendo los signos de envejecimiento cronológico que se traducen en pliegues y arrugas.
Los rellenos de ácido hialurónico contribuyen a mejorar las características faciales:
El uso de distintas combinaciones de ácido hialurónico con diferentes pesos moleculares, su alta cohesividad y el uso de ácido hialurónico de alta pureza.
El objetivo: mantener la expresión de cada rostro.
Lo primero es elegir el gel de ácido hialurónico con la textura más adaptada a la zona que vayamos a tratar, en su mayor parte, contienen lidocaína, un anestésico que aliviará las molestias, siendo el tratamiento más confortable.
Los resultados son inmediatos, con un efecto que puede durar hasta 12 meses, dependiendo de la zona a tratar. Además, como los rellenos de ácido hialurónico no son permanentes , siempre podrás elegir o no el tratamiento y controlar así tu aspecto.
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